Las mejores maletas de transporte para bicicleta del 2025

Para quien suele dejar la bici en el garaje o en la terraza, esta funda de Vaude en Negro / Antracita (Black/Anthracite) puede ser una solución práctica para protegerla del polvo, la humedad y algún que otro roce. Las medidas de 27.94 cms de alto x 129.54 cms de largo x 83.82 cms de ancho encajan bien con bicicletas de tamaño estándar, así que si tienes una bici urbana o de montaña normal, debería ajustarse sin problema.

Lo que mola es que está hecha 100 % de poliéster, un material resistente pero ligero, que facilita ponértela y quitártela sin complicaciones, además de aguantar bien el día a día. No pesa nada, por lo que no supone un lastre si la llevas plegada. En definitiva, parece un accesorio sencillo pero eficiente para mantener la bici protegida sin liar demasiado. Perfecto si buscas algo funcional y sin complicaciones.

Esta bolsa para bicicleta Borgen en color negro parece ideal para quienes usan la bici para desplazarse a diario y necesitan llevar el portátil sin complicaciones. Lo que me parece más práctico es que se convierte súper rápido de alforja a mochila o bolsa de mensajero, así la puedes llevar cómodamente cuando te bajas de la bici. También es buena para quienes tienen bicicletas eléctricas, ya que se adapta bien a portaequipajes incluso con batería abajo.

El detalle que me llama la atención es el bolsillo acolchado para el portátil, que evita que se mueva o sufra golpes en trayectos irregulares, algo que se agradece cuando vas a clase o al curro. Además, es 100 % impermeable y tiene partes reflectantes para circular con más seguridad por la noche. Con un tamaño de 43.18 cms de alto x 27.94 cms de largo x 12.7 cms de ancho y pesando solo 0.9 kg, parece versátil y ligera. Si buscas algo funcional sin complicarte, esta bolsa parece un buen compañero de rutas urbanas.

Este portatrajes de TRAVANDO en Negro parece bastante práctico para quienes suelen viajar por trabajo o eventos y necesitan llevar ropa formal sin que se arrugue. Me mola que no sea solo para trajes, porque tiene un compartimento amplio para el portátil y documentos, así que puedes llevar todo en un mismo sitio sin acabar con mil bolsas. Es ideal si no te gustan las complicaciones y quieres algo que aguante al viento y la lluvia, gracias a que está hecho de nylon resistente.

Además, la posibilidad de llevarlo de varias formas – de la mano, colgado del hombro o en el carro – se agradece mucho cuando estás moviéndote por aeropuertos o trenes. Las placas antiarrugas me parecen un detalle inteligente para evitar el mal trago de llegar con la ropa arrugada. Por dimensiones y peso, no parece que te vaya a cargar demasiado. Si buscas algo sencillo pero funcional para viajes con estilo, este estuche da buenas vibraciones.